
Durante la noche del Jueves 8 de Mayo, cerca de la madrugada, Romina iba en moto a visitar a una amiga cuando le pareció escuchar un sonido de piano dentro del cementerio. Su relato es escalofriante.
VMI-¿Vos venías en moto?
Romina– En realidad me pasé de largo, tenía que doblar por Pringles, pero no conozco la zona y terminé en el cementerio. Como la calle es doble mano, pero tiene un boulevard, busqué para dar la vuelta, y ahí escuché el piano.
VMI- ¿Viste alguien en la calle?
Romina-Vi un nene en la esquina, que no se que hacía a esa hora, porque era tarde, pero cuando yo fui a doblar estaba lejos.
VMI-¿Qué escuchaste exactamente?
Romina-Era un piano con una música que no era clásica, era como esa que hacían escuchar antes en la escuela, en los actos de primaria.
VMI-¿Folclore?
Romina– Si, como una zamba. Primero pensé que podía ser de alguna casa, o de alguna iglesia, pero para mi salía del cementerio.
VMI-¿No viste a nadie que estuviera sentado escuchando música en algún lado?
Romina– Mirá, tuve un segundo que pensé que podía haber alguien con un teléfono, bajé la velocidad, no vi a nadie, pero para mi venía de adentro del cementerio. Sonaba muy fuerte. Me corrió un escalofrío por la espalda y me fui. También pensé que alguien me podía estar viendo para robarme.
VMI-¿Estás bien ahora?
Romina-Me quedó un poquito de miedo, porque después me contaron historias. Por las dudas, no paso mas por ahí.