Este viernes, el Tribunal condenó a Néstor Enrique Núñez por el delito de estafa en perjuicio de una empresa constructora de Villa Mercedes. La pena impuesta fue de tres años de prisión condicional, bajo la advertencia de que podría volverse efectiva si no cumple con las condiciones fijadas: fijar domicilio y abstenerse de consumir estupefacientes o alcohol.
Según la Fiscalía, Núñez –titular de una empresa dedicada a la fabricación de sanitarios y PVC– habría actuado de mala fe en perjuicio de la constructora, dejando un saldo impago superior a los 600 mil dólares. El caso se originó tras dos contratos de obra: el primero, por 198 mil dólares, fue cancelado sin inconvenientes, pero el segundo, valuado en 1,2 millones de dólares, quedó con un monto pendiente que nunca se abonó.
El Ministerio Público Fiscal sostuvo que Núñez buscó no pagar el saldo adeudado, excediendo un mero incumplimiento contractual. En cambio, la Defensa –a cargo de los abogados Salvador Hugo Scarzo y Carlos Gabriel Varela– argumentó que la obra no fue terminada y que su cliente también sufrió graves perjuicios económicos.
Los representantes de la empresa afectada –Julio César Fernández Triches y Sergio Bringas– respaldaron la acusación fiscal.