
Viviana Villalba, una joven argentina de 22 años, falleció en un trágico e inusual accidente ocurrido en Brasil. Había partido desde Misiones con la esperanza de construir una nueva vida, pero encontró un destino trágico en la madrugada del domingo pasado.
El hecho sucedió en la autopista ERS-344, entre Giruá y Santo Ângelo, en el estado de Rio Grande do Sul. Según los primeros reportes, Villalba fue atropellada por un automóvil Volkswagen Fox. El conductor, cuya identidad no trascendió, no se detuvo tras el impacto. En cambio, siguió su marcha con el cuerpo de la joven sobre el techo del vehículo durante varios kilómetros.
En su declaración ante la policía local, el automovilista aseguró que había niebla en el momento del accidente y que creyó haber chocado contra un animal. Dijo haberse percatado de la presencia del cuerpo solo al llegar a su casa y estacionar en el garaje. Recién entonces realizó la denuncia, cerca de las 4 de la mañana.
Según medios locales, el hombre se negó a realizarse el test de alcoholemia. Además, declaró que la joven caminaba por el medio de la carretera, vestida únicamente con una remera negra y sin ropa inferior. Tras confirmar el fallecimiento, su cuerpo fue trasladado al Puesto Médico Legal de Sao Luiz Gonzaga, donde se realizará la autopsia.
Un video de una cámara de seguridad captó el momento en que el auto, con el cuerpo de Villalba en el techo, pasa dos veces por el mismo lugar en apenas tres minutos. Las imágenes refuerzan las dudas sobre la versión del conductor y alimentan el desconcierto sobre cómo no advirtió la presencia del cuerpo.
La delegada Elaine Maria da Silva, a cargo de la investigación, informó que el conductor fue acusado de homicidio culposo. El caso fue elevado al Poder Judicial de Brasil.
Viviana Villalba, nacida en Tartagal, Salta, había vivido gran parte de su vida en Misiones. Aunque en redes sociales se presentaba como residente de Campo Grande, fuentes locales indicaron que en realidad vivía en Pueblo Illia, localidad del municipio de Dos de Mayo.