
Se trata de Gonzalo Mastronardi , que recientemente removido de su cargo en el Ministerio de Turismo y Cultura de San Luis, generó gran polémica con sus declaraciones sobre dos emblemas de la música puntana, “Calle Angosta” y “Caminito del norte” . Mastronardi, un funcionario de perfil técnico y de origen villamercedino, llegó al puesto tras su gestión como secretario de Cultura en Merlo , recomendado por el intendente Juan Álvarez Pinto .
La frase polémica y su consecuencia
Durante una conferencia de prensa en la capital provincial, Mastronardi afirmó que los puntanos estaban “ cansados de escuchar Calle Angosta y Caminito del norte ”, comentarios que generaron rechazo inmediato. Ambas canciones son pilares culturales y emocionales en San Luis, símbolos de la identidad provincial. Estos dichos hicieron que su puesto, hasta ese momento consolidado, se volviera insostenible.
Un Perfil Técnico en un Rol Cultural
Mastronardi era conocido más por su experiencia en sonido e iluminación que por sus habilidades en la gestión cultural. Su enfoque técnico contrastaba con las responsabilidades amplias de su puesto, lo que llevó a cuestionamientos internos en el Ministerio de Turismo y Cultura , liderado por el también radical Juan Manuel Rigau . Además, su estilo informal, visto en eventos como la Fiesta Nacional del Sol , donde caminaba en camiseta deportiva, lo diferenciaba de sus colegas, más acostumbrados a atuendos formales.
La estrategia cultural y el choque de visiones
Su gestión en el Cine Teatro San Luis, el Molino Fénix, y el Centro Cultural Puente Blanco estaba orientada a una visión moderna de la cultura, impulsando géneros contemporáneos como hip hop, reggaetón y trap, lo que generó controversia. Anteriormente, había propuesto un concurso para renovar el cancionero tradicional, argumentando que la juventud prefería estilos modernos para reflejar la realidad puntana, lo cual no fue bien recibido por sectores tradicionales de la cultura local.
Reacciones y futuro de la gestión cultural
Este incidente reabre el debate sobre el rumbo de las políticas culturales en San Luis, cuestionando si las estrategias deben ser renovadas o si deben honrar más profundamente los elementos tradicionales. La salida de Mastronardi exponen la tensión entre mantener la herencia cultural y adaptarse a nuevas expresiones, un desafío que deberá asumir la próxima administración del área