El Gobierno argentino firmará un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para autorizar el nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con el objetivo de avanzar en las próximas semanas en la concreción del programa. Posteriormente, se buscará el respaldo del Congreso para ratificar la normativa, tal como lo exige la Ley 27.612 de Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública, sancionada en 2021. Este paso es crucial, ya que cualquier nuevo endeudamiento con el FMI requiere la aprobación del Poder Legislativo.
El presidente Javier Milei ha destacado que este acuerdo será fundamental para sanear el Banco Central (BCRA) y avanzar en la liberación de las restricciones cambiarias, pilares de su plan económico para reducir la inflación. Según el ministro de Economía, Luis Caputo, el monto del nuevo préstamo ya fue definido, aunque no se ha revelado públicamente. Las estimaciones del mercado oscilan entre US10.000millonesyUS20.000 millones.
El proceso para cerrar el acuerdo incluye varias etapas: la publicación del acuerdo técnico, la firma del Memorándum de Políticas Económicas y Financieras y del Memorándum Técnico de Entendimiento, y finalmente, la aprobación del Directorio del FMI. Aunque el organismo multilateral ha señalado que no requiere el aval del Congreso, considera que el respaldo político es clave para el éxito del programa.
Respecto al acuerdo vigente, aún restan dos revisiones pendientes del programa firmado en 2022. Una vez aprobadas, el FMI desembolsará US$1.000 millones correspondientes a esas instancias. En cuanto al nuevo programa, se espera que se cierre hacia fines de abril, aunque no hay una fecha precisa para la llegada de los fondos frescos.
Caputo ha descartado que el acuerdo implique una devaluación del peso, afirmando que la estabilidad cambiaria es una prioridad para el Gobierno. Sin embargo, los detalles finales del programa y su impacto económico seguirán siendo objeto de análisis en las próximas semanas.
