El ministro de Economía, Luis Caputo, admitió este lunes que la suba de tasas de interés puede tener un efecto negativo sobre la actividad económica en el corto plazo. No obstante, aseguró que se trata de un impacto transitorio, condicionado por la coyuntura electoral, y confió en que habrá una rápida recuperación luego de los comicios legislativos de octubre.
Caputo explicó que la reciente volatilidad de los mercados se debió a los “últimos intentos de romper con el equilibrio fiscal en el Congreso”. Según su visión, una victoria del oficialismo en las urnas podría mejorar la percepción de riesgo político y generar un escenario más favorable.
En un extenso posteo en X, el ministro respondió al economista Fernando Marull, quien había advertido que el alza de tasas en pesos podría empujar a la economía hacia una recesión. Caputo defendió que las tasas actuales son “endógenas”, determinadas por el mercado en función del programa monetario del Gobierno, y rechazó la idea de que se mantengan artificialmente altas.

“Nadie regala plata. Si las tasas estuvieran ‘ridículamente’ altas, el mercado ya habría arbitrado, vendiendo dólares y comprando Lecaps, lo que provocaría su baja”, argumentó.
Sin embargo, el ministro reconoció que un período prolongado con tasas elevadas sí podría generar efectos contractivos y enfriar la economía real, al encarecer el crédito y desalentar inversiones.
Actualmente, el Tesoro ofrece letras capitalizables a un mes con tasas cercanas al 70% anual, muy por encima de las proyecciones inflacionarias. La estrategia apunta a sostener el atractivo de las colocaciones en pesos y contener la presión sobre el dólar, aunque también implica riesgos fiscales por el creciente costo de intereses.
Aun así, Caputo minimizó los riesgos en el horizonte cercano y remarcó que la política es temporal:
“Podría haber algún impacto en el nivel de actividad en el corto plazo, pero debería recomponerse rápidamente post elecciones”, afirmó.
