El delantero de Lanús, Leandro Díaz, protagonizó un violento episodio durante un amistoso de pretemporada ante Tigre que terminó con un jugador rival hospitalizado y fuertes repercusiones en el club. La dirigencia granate, presente en el lugar, ya habría decidido buscarle salida al jugador en este mercado de pases.

El incidente ocurrió este sábado en el predio de la AFA en Ezeiza, donde ambos equipos se enfrentaban en un encuentro preparatorio para la temporada 2025. En un momento de tensión, Díaz golpeó brutalmente a un juvenil de Tigre que se encontraba en el suelo tras una disputa por el balón. Ante esta situación, el defensor Alan Barrionuevo, ex Deportivo Riestra, intentó interceder, pero fue recibido con un golpe directo en la boca que le ocasionó serias lesiones.

Consecuencias físicas y deportivas

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Tras el golpe, Barrionuevo debió abandonar el campo escupiendo sangre y fue trasladado al hospital, donde se confirmó que había sufrido el hundimiento de dientes y daños en la encía. El partido fue suspendido inmediatamente, y se estima que el defensor necesitará varias semanas para su recuperación.

Este episodio también impactó fuertemente en el entorno de Lanús. Bajo la conducción de Mauricio Pellegrino, el equipo se prepara para afrontar una exigente temporada con triple competencia: Liga Profesional de Fútbol, Copa Argentina y Copa Sudamericana. Sin embargo, este hecho genera incertidumbre sobre el armado del plantel, especialmente considerando que Díaz era una pieza clave en el ataque.

Un final anunciado para Díaz en Lanús

La relación entre el delantero y el club ya venía tensionada. Tras ganar el clásico ante Banfield meses atrás, Díaz había manifestado su deseo de dejar el equipo. Ahora, con la dirigencia como testigo directo del altercado y el descontento del cuerpo técnico, todo indica que el ciclo del delantero en Lanús está llegando a su fin. Por el momento, entrenará con la Reserva mientras se busca un club interesado en sus servicios.

Este lamentable hecho no solo afecta la imagen del jugador, sino también pone en el centro del debate la necesidad de promover un ambiente más saludable en el fútbol profesional.