Los desbordes cloacales en Villa Mercedes no son un problema nuevo, pero una reciente oleada de rumores vuelve a poner el foco en un presunto sabotaje que involucra al gremialismo de Obras Sanitarias.

Según varias fuentes, incluso trabajadores del organismo, el mandamás del gremio habría utilizado históricamente los sistemas de cloacas como un método de presión para lograr sus objetivos, una táctica que ahora estaría resurgiendo en medio de tensiones laborales.

A pesar de que el municipio ha invertido recursos en el trabajo constante de limpieza y mantenimiento de cloacas, los desbordes se repiten en distintos puntos de la ciudad. Durante gestiones municipales anteriores, existía una especie de advertencia no oficial: “No hay que meterse con Obras Sanitarias porque los muchachos cierran las llaves, las abren de golpe y rompen todo“. Esto fue considerado durante mucho tiempo como una leyenda urbana, pero en las últimas semanas se habla de un posible regreso de esas tácticas bajo la dirección del titular del sindicato.

Según los trascendidos, el gremialista estaría convocando a un paro de empleados y utilizando la rotura de cloacas como medida de presión. Las especulaciones apuntan a que esta estrategia busca escalar en reclamos laborales, vinculados a la pérdida del pago de la productividad para los empleados que se sumen a la medida de fuerza.

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Además, algunos rumores sugieren una conexión entre el accionar del gremio y la campaña electoral de Alberto Rodríguez Saá en las internas del Partido Justicialista. Aunque no hay confirmación oficial, los comentarios sobre una posible alianza entre el gremialismo villamercedino y la política local han encendido las alarmas, dejando entrever un trasfondo político en esta nueva crisis cloacal. Ver fuente…

La situación pone en jaque no solo a los ciudadanos afectados por los desbordes cloacales, sino también a la gestión municipal, que deberá enfrentar una problemática que parece tener tanto causas técnicas como políticas y gremiales.