El Gobierno nacional analiza eliminar el subsidio al gas en el marco del Régimen de Zona Fría, una medida que permitiría un ahorro estimado en US$ 300 millones. El ministro de Economía, Luis Caputo, evalúa derogar por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) la ampliación de este beneficio, sancionada en 2021 durante el gobierno de Alberto Fernández.
Según fuentes del área energética, abogados del Ministerio de Economía estudian las implicancias legales de revertir la Ley 27.637, que extendió el subsidio a 3,1 millones de usuarios, muchos de ellos en zonas de clima templado y con ingresos medios-altos. El régimen, creado originalmente para asistir a hogares en regiones con bajas temperaturas como la Patagonia, fue ampliado bajo criterios cuestionados, beneficiando incluso a provincias como Córdoba, Mendoza y el interior bonaerense.
Actualmente, el subsidio se financia con un recargo del 7% en las facturas de otros usuarios y con aportes del Tesoro Nacional, contradiciendo la promesa inicial de que no requeriría fondos estatales. Desde el Gobierno argumentan que el esquema actual distorsiona el consumo: un informe de la consultora Economía y Energía reveló que, entre 2021 y 2024, el uso de gas aumentó 7% en las zonas incorporadas, mientras cayó 9% en las excluidas.
La posible derogación se analiza para después de las elecciones legislativas de octubre, evitando el rechazo de gobernadores en el Congreso. De concretarse, se volvería al sistema original de 2002, que beneficiaba solo a 850.000 hogares en regiones extremadamente frías.
Mientras tanto, el Gobierno ya comenzó a ajustar el programa, excluyendo a usuarios con más de un medidor. La decisión final dependerá del análisis jurídico y del impacto político en un contexto de ajuste fiscal.
