El Gobierno acelera su plan de privatizaciones en transporte y energía

En noviembre se licitan rutas nacionales y represas hidroeléctricas por más de 700 millones de dólares.

El Gobierno nacional avanza con una agresiva agenda de privatizaciones que apunta a desprenderse de empresas estratégicas de los sectores transporte y energía. La administración de Javier Milei busca capitalizar el impulso político posterior a las elecciones para consolidar el traspaso de activos estatales a manos privadas.

En el corto plazo, el Ministerio de Economía, junto con la Agencia de Transformación de las Empresas Públicas, prevé lanzar las licitaciones de rutas y cuatro represas hidroeléctricas durante noviembre. Según fuentes oficiales, el objetivo es “mostrar señales claras de que el proceso privatizador está en marcha y no se detendrá”.

Rutas, represas y nuevas etapas

El ministro Luis Caputo adelantó que el sector privado “invertirá, hará obras y administrará con más eficiencia”. En las próximas dos semanas se espera la preadjudicación de la Ruta del Mercosur, concesión para la cual se presentaron siete ofertas.

El 7 de noviembre se conocerán las propuestas para la reprivatización de las represas Alicurá, El Chocón, Arroyito, Piedra del Águila y Cerros Colorados, con una recaudación estimada entre US$500 y US$700 millones. Las licitaciones habían sido postergadas por pedido de los interesados, entre los que figuran AES Argentina, Enel, Central Puerto y Orazul.

Más empresas en la mira

El Ejecutivo también trabaja en los documentos para vender la participación estatal en Transener, principal transportista eléctrica del país, antes de febrero. En AYSA, se avanza con la valuación para su futura colocación en la Bolsa. Además, se prevé licitar Belgrano Cargas y la Hidrovía del Paraná antes de fin de año, mientras que la privatización parcial de Nucleoeléctrica podría concretarse entre diciembre y los primeros meses de 2026.

A mediano plazo, se prepara la segunda etapa de licitaciones viales, que incluirá más de 4400 kilómetros de rutas nacionales. Entre las empresas mencionadas para una futura desinversión figuran Enarsa, Arsat, Correo Argentino y Aerolíneas Argentinas.