La investigación por la muerte de Paloma Gallardo (16) y Josué Salvatierra (14) en un descampado de Florencio Varela tomó un giro clave: la autopsia confirmó que ambos jóvenes sufrieron fracturas de cráneo y traumatismos encefalocraneales graves, descartando la posibilidad de un suicidio.

Según el informe forense, la causa de muerte de Paloma Gallardo fue una “lesión cerebral”, mientras que Josué Salvatierra falleció por una “hemorragia cerebral”. Ambos cuerpos presentaban signos de violencia extrema.

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Los adolescentes eran alumnos de la Escuela Secundaria N° 63 y fueron hallados debajo de un puente, cerca de la fábrica de baterías Champion, en las inmediaciones de la plaza de la localidad de Bosques.

La Policía Bonaerense baraja varias hipótesis, entre ellas un posible robo seguido de muerte, ya que los celulares de las víctimas y la mochila de Salvatierra no fueron encontrados en la escena del crimen.

La desaparición de ambos fue denunciada por sus familias el jueves pasado. El padre de Paloma, Omar Gallardo, relató que su hija fue vista por última vez cuando se dirigía al gimnasio a las 18:00, pero nunca regresó. En tanto, los padres de Josué, preocupados por su ausencia, alertaron al 911.

Tras conocerse el hallazgo de los cuerpos, decenas de vecinos se manifestaron frente a la Comisaría 4ta de Bosques, exigiendo justicia y mayor seguridad. La protesta incluyó el corte de la Ruta 36 y de las vías del tren Roca, afectando el servicio ferroviario.

Los manifestantes denunciaron que no es la primera vez que ocurren asesinatos en la zona, asegurando que en ese descampado “aparecen cuerpos dos o tres veces por mes”.

La investigación continúa y las autoridades buscan determinar las circunstancias del crimen y dar con los responsables.