
Las autoridades del estado de Río Grande do Sul, en el sur de Brasil, comenzaron este domingo la instalación de siete barreras sanitarias en carreteras para contener el brote de gripe aviar detectado en una granja comercial del municipio de Montenegro. La medida llevó a la suspensión temporal de las exportaciones de pollo.
El gobernador Eduardo Leite decretó la medida, que incluye la desinfección de vehículos, especialmente camiones de carga, en un radio de 3 a 10 kilómetros del foco infeccioso, con operativos las 24 horas del día.
Brasil, el mayor exportador mundial de carne de pollo, confirmó el caso el 16 de mayo. El Departamento de Vigilancia y Defensa de la Salud Animal ya realiza patrullas en granjas dentro del perímetro de seguridad para inspeccionar vehículos que transportan alimento o leche.
Según el Ministerio de Agricultura de Brasil, no hay riesgo de contaminación en huevos y se han tomado “todas las medidas necesarias” para proteger la avicultura nacional. Además, el contagio en humanos es poco frecuente y suele darse solo en casos de contacto directo con aves infectadas.